Aprender vs. hacer

Por Roberts, para Unglobal.

Se han quedado con la boca abierta, sin entenderlo, hasta que he dado un breve argumento que pudiera explicarlo en parte. Después de hacer una presentación de nuestra participación en el proyecto Ndaane ne kwouotche, y de lo bien que creo que hemos hecho algunas cosas (hay otras que no, claro), he terminado diciendo “Sin embargo, creo que, por lo general, los estudiantes de medicina no deberían hacer este tipo de cosas, participar en estos proyectos”.

Es una frase complicada, que dice muchas cosas al mismo tiempo, unas contrarias a las otras, algunas veces. Y no es fácil explicar lo que quiero decir con eso. Es posible que lo que muchos interpreten al leer o escuchar esa frase no se corresponda con lo que yo quiero decir. Entonces he descubierto lo guapo que estoy callado y sin complicarme la vida, y he comprendido que tenía que salir del paso, y dar alguna explicación de mi afirmación. La primera que me ha venido a la cabeza ha sido el compromiso.

“Los estudiantes que hemos participado en este proyecto y los que siguen participando tienen un compromiso que casi ningún estudiante tiene. En mi caso particular, hablo entre otras cosas de haber priorizado la coordinación de parte del proyecto por encima de todo lo demás, incluyendo mis estudios (Lo que entre mis compañeros de mi facultad podría constituir casi una herejía). Casi ningún estudiante quiere o es capaz de hacer eso, y por esa razón, opino que no debería participar en cooperación internacional.” Es sólo un argumento de tantos, en un tema muy complicado, y sobre el que tengo muchos argumentos y opiniones enfrentadas. Y creí que había salido del paso. Pero una de mis compañeras entonces dice “por lo que yo he visto entre estudiantes de medicina, muchos sí se comprometen. No entiendo por qué dices eso”. He respondido de manera casi automática: “Es posible que se comprometan a hacer, a hacer cosas, yendo al destino que sea y colaborando en centros de salud, hospitales, o programas de promoción de salud. Pero ninguno quiere comprometerse en lo que realmente es importante: aprenderlo todo, desde el principio de todo. Eso conlleva un tiempo, un esfuerzo y un sacrificio que casi todos consideran inútil.”

Se ha hecho el silencio y la profesora ha dicho “creo que has tocado un punto muy interesante”.

Va a ser que sí...

Nota: Lo que reflejo aquí es una anécdota de clase, y no todo lo que yo opino al respecto del tema. Lo considero un tema complejo, con muchas más cosas a tener en cuenta, sin demasiados tonos blancos ni negros, sino muchos grises, unos más oscuros y otros menos.